Cuando un niño se enfada expresa su enfado con todo el cuerpo, es muy común que cuando algo les causa rabia mientras expresan con la palabra su enfado lo acompañen de patadas al suelo y gesticulen con los brazos ,por no hablar de los bebes que lo expresan con su cuerpo y cara por completo.
En la medida que vamos creciendo dentro de una educación basada en la represión y juicio sobre la rabia aprendemos a contenerla porque nos enseñaron que sentirla es algo malo y ,casi de mala educación expresarla con nuestro cuerpo.
La rabia es un sentimiento, la calificación de bueno o malo es un juicio aprendido en nuestra cultura, de hecho sentirla es lo natural y su represión bloquea nuestro cuerpo.
En mi experiencia profesional he observado como la represión de este sentimiento lejos de hacerlo desaparecer se va quedando en nuestros brazos y piernas afectando a todos los tejidos incluidos los huesos.
Muchas terapias psicológicas y psico-corporales proponen al paciente que la expresen en un ambiente seguro golpeando un cojín o pegando patadas a un balón. Pero lo primero que hay que contemplar es el cambio de creencia de que sentirla es algo malo o algo a superar porque sino el ejercicio no resultará eficaz y reforzará la creencia.
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Vanesa Saavedra